Entre el panteón de los dioses y diosas de la mitología india, hay uno ecuestre de piel azul, a menudo confundió con la deidad amada y universalmente conocida, Krishna. Una mirada más cerca al vello facial y a la cobra que ese encuentra alrededor de su cuello, sin embargo, sugirió que podría ser Shiva: el destructor. Pero el “vehículo” no el toro poderosos Nandi. Al preguntar a los lugareños, le dirán que se trata realmente de Karuppu Sami, la “deidad negra”...
Entre el panteón de los dioses y diosas de la mitología india, hay uno ecuestre de piel azul, a menudo confundió con la deidad amada y universalmente conocida, Krishna. Una mirada más cerca al vello facial y a la cobra que ese encuentra alrededor de su cuello, sin embargo, sugirió que podría ser Shiva: el destructor. Pero el “vehículo” no el toro poderosos Nandi. Al preguntar a los lugareños, le dirán que se trata realmente de Karuppu Sami, la “deidad negra” y socio del guardián principal de la aldea, Ayyanar.
Al igual que la debida guardiana principal, Ayyanar tiene la obligación de proteger a la aldea. Tambien concede bendiciones y asegura lluvias abundantes y cosechas. Sentado sobre un brillante semental blanco con la espada en la mano, se cree que cumple de una manera feroz su deber de proteccion incluso hoy, patrullando su feudo cada noche.
Para expresar su gratitud, los habitantes de Ayyanar ofrecen de manera tradicional sus votos con caballos de terracota. Fabricados por Velares (sacerdotes alfareros no Brahmín) estos caballos estan hechos de una mezcla de barro y arena, a la que se le da forma de caballo antes de ser calentado en el horno. Estos, despues de este proceso, son decorados y finalmente consagrados a Ayyanar.
La vista de cientos de corceles de arcilla que bordean el camino es impresionante y un gran éxito entre los niños. Las historias t leyendas de estos caballos que vigilan durante la noche incluso despues del paso de tantos siglos es evocadora y extrañamente tranquilizadora. Si el tiempo lo permite, podríamos organizar la visita a la casa de un alfarero para que usted pueda ver desde primera fila el proceso de creación de estos caballos tan bonitos.
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